Para
que haya armonía entre las personas, los grupos sociales establecen condiciones
mínimas de convivencia, las cuales
ayudan a evitar conflictos con las personas que nos rodean, bien sea en la
familia, con los vecinos o con los amigos.
Los indígenas wayuu, al igual que cualquier ser
humano, tienen enfrentamientos con otras personas de su misma cultura, cuando
esto sucede, no pelean, sino que recurren a una autoridad tradicional, muy
recurrente por su elocuencia y prudencia llamado pütchipu’u o palabrero.
¿Quiénes
son los palabreros?
El palabrero Wayuu puede considerarse un
intermediario, en la medida en que sólo lleva las "palabras" y
peticiones de la parte ofendida hasta los agresores y aclara, antes de
exponerlas, que no se apartará de lo que le fue encargado transmitir.
El palabrero es llamado para recibir la
misión de efectuar la reclamación en nombre de todo el grupo de parientes
afectados, pero éste tomará en serio su designación sólo si ella proviene del
jefe tradicional reconocido o de sus parientes uterinos más representativos.
Una vez que el palabrero ha sido informado en detalle de los hechos puede
manifestar su aceptación o su rechazo a la misión encomendada.
La elección de este intermediario denominado pütchipu’u o "palabrero" será
sumamente cuidadosa cuando se trata de
un caso grave de muerte o derramamiento de sangre, pues la persona escogida no
debe ser, en sentido ideal, pariente cercano de los grupos afectados aunque
puede tener nexos de afinidad con algunos de ellos. Consideraciones importantes
en su selección son el prestigio de dicho palabrero en la solución de otros
casos en el pasado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario